“Defender sus derechos protegiendo su libertad”
Por Mony Ortega/APIM.
Huajuapan de León, Oax. 05-10-2019.- Este día 05 de octubre de 2019 como todos los años se conmemora el día de los Derechos de las Personas con Parálisis Cerebral asentados en la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
La parálisis cerebral engloba un grupo de trastornos permanentes del desarrollo que involucran el movimiento, la postura, la comunicación, por mencionar algunos aspectos de la persona, es una condición especial de vida permanentemente, no es una enfermedad, tampoco se contagia, no se hereda y no hay medicina que pueda curarla.
En el manifiesto del Día Mundial de la Parálisis Cerebral 2019 se prioriza: defender sus derechos protegiendo su libertad.
La discriminación hacia las personas con parálisis cerebral es evidente por su condición física debido a que presentan grandes necesidades de apoyo a simple vista, todas se enfrentan a un entorno que les excluye porque sus necesidades no han sido tomadas en cuenta en el diseño de nuestra sociedad desde el punto de vista que uno lo considere.
Sus derechos no se respetan del mismo modo que los del resto de las personas, ya que las personas con parálisis cerebral tienen necesidades de apoyo. Todas y cada una de ellas enfrentan a un entorno que les excluye porque sus necesidades no han sido tomadas en cuenta en el diseño de nuestra sociedad.
Requieren de apoyos especializados para la comunicación, el desplazamiento, la comprensión o la alimentación, entre otras. Lo que ocasiona que, en las instituciones educativas, oficinas públicas, en actividades culturales y/o deportivas dentro de la comunidad, pero sobre todo son especialmente vulnerables a vivir situaciones de discriminación y dificultades para ejercer todos sus derechos con igualdad de oportunidades.
Situaciones en las que sus derechos no han sido respetados:
- La discriminación social.
- La imposibilidad de participar en actividades culturales y de ocio.
- La falta de apoyo en entornos educativos ordinarios.
- La falta de accesibilidad universal.
- Las dificultades de movilidad.
- La invasión de su intimidad personal.
Una situación especial de vulnerabilidad que viven este grupo de la población son las mujeres con parálisis cerebral (debido a los prejuicios sociales impiden que ellas formen parte de programas vinculados a la autonomía y la vida independiente; se vulnera su derecho a tomar decisiones propias).
Se requiere apoyar a una sana inclusión de las personas con parálisis cerebral mediante:
Garantizar una atención oportuna interdisciplinaria y universal a las personas con parálisis cerebral, sin importar su lugar de residencia, origen étnico, nivel socioeconómico, desarrollando los recursos necesarios para ello desde su diagnóstico a temprana edad.
Establecer una coordinación entre los servicios de salud. educativos y las instituciones gubernamentales, tanto públicos como privados creando redes como fuentes de atención, orientación y asesoramiento.
Ofrecer una especial protección a la mujer con parálisis cerebral, que se enfrenta a las situaciones de vulneración más graves; como las esterilizaciones forzosas, la violencia de género o la intromisión en su vida íntima.
La labor de sensibilización para valorar al máximo las capacidades de las personas con parálisis cerebral es gigantesca, pero podemos empezar con medidas como el acompañamiento social para la toma de decisiones en su vida diaria.
